Propulsó desde los testículos un tremendo chorro de ardiente semen que María saboreó y lamió con fruición hasta que los temblores cesaron y el hombre cayó desmadejado, unicamente sujeto por las ataduras de sus muñecas.
Mis cosas, mis neuras y mis tonterias, que son muchas y variadas...
Muuuda, me he quedao. ¡Jesús!
ResponderEliminarJur, jur, jur, esta entrada va calentita...
ResponderEliminarUna pregunta: y lo de las ataduras en las muñecas, ¿va como represalia por lo que le hizo antes? Jajajajaja
O.o
ResponderEliminarwauuuuu!!!
=)
ResponderEliminarAle, ya se me ha pasado todo el frío que traía de la calle!! jajaja. Qué ganas de leer todos estos avances de un tirón!!!
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